8 de mayo de 2012



Pero ¿quién podrá contar la multitud de cosas menudísimas y despreciables con que es tentada todos los días nuestra curiosidad y las muchas veces que caemos? ¿Cuántas veces, a los que narran cosas vanas, al principio apenas si los toleramos, por no ofender a los débiles, y después poco a poco gustosos les prestamos atención?


Agustin de Hipona, Confesiones, Lib. X, 35, 57



No hay comentarios: